Entradas

Mostrando entradas de 2012

Una carta a destiempo para el Sr. A. H. jefe del Tercer Reich.

Imagen
Nota: Perdida para siempre la ubicación y el rastro de la carta original que leerán a continuación y después de haberme pasado varios meses y años buscándola inútilmente en los archivos de la benemérita Hemeroteca Municipal de La Paz, intento reproducir  este artículo escrito (según recuerdo) de forma epistolar por el famoso periodista Alfonso Prudencio "Paulovich"  y publicada en su eterna  columna: "La Noticia de Perfil" hace ya varias décadas atrás, después de que William Camacho haya sugerido que deberíamos re escribirla, ya que bien podría ser usada en estos tiempos de "exacerbaciones regionalistas". Faltando voluntarios para la tarea, hoy me doy el gusto de saldar una deuda con todos aquellos a los que, entre copa y copa, les conté del dichoso artículo que jamás pude hallar, tratando de incluir en esta versión, la mayoría de detalles que recuerdo y me parecen importantes, no siendo de ninguna manera fieles al original, pero tratando d

El Polio y superman

Imagen
Anoche, al Coqueluche le han dado un ataque terrible de asma y podría asegurar que un rato de esos, casi se muere. Ver a alguien morir debe ser medio feo. Seguramente que al comprender que se lo lleva la flaca, agranda los ojos y le caen unos lagrimones que le mojan toda la cara. Seguro que se agarran al pecho con ambas manos para sentir si aún les late el corazón y en las millonésimas de segundos que transcurren ante sus ojos mostrándoles la realidad de la vida, deben cambiar de cara, poniéndose llorosos y desesperados. Pobre Coqueluche le ha dado un patatús. Eso le he dicho a mi mamá esta mañana cuando ha venido a verme. Le he dicho que la enfermera nos toma como a unos tarados y que el Coqueluche es un buen chico, pero que anoche casi se muere y que me he asustado mucho, porque no quería ver ni escuchar su alma vagando por los pasillos del hospital. Pobre Coqueluche, le ha dado un patatús. Se ha ido a colgar de la ventana para que no le pongan una inyección. La babosa de la

Las hojas sueltas

Imagen
Por las mañanas, los visten de amarillo, los ordenan en filas y con mucho cuidado los sacan a conocer el mundo. Miran como el viento sacude las hojas de esos arboles grandooootes, levantan los dedos rosados y melosos al cielo y ven las nubes que se disipan formando figuras chistosas. La profesora habla de las cactáceas, de la importancia del sol, del viento, de la lluvia y por qué en otoño las hojas deciden morir y entregarse a los vientos; de por qué no se deben apedrear a los pájaros en vista de que el destino también suele arrancarnos las alas y nos obliga a arrastrarnos por la eternidad, tal como lo dice la biblia… Y ellos piensan en la tristeza como el último pedazo de un chocolate; como el helado derretido en el suelo o como la tardanza de mamá. En estas incursiones por la brevedad del mundo, levantan piedritas redondas y se las meten en la boca. Conocen el sabor de la tierra. Remolinos de viento levantan las hojas en espirales mágicas que parecen los monstruos que en las no